domingo, 18 de abril de 2010

PALABRAS QUE NO VALEN NADA

Valor para el camino.
Valentía y coraje.
Valor para el camino.

Soy como el cielo que nunca quiso suspirar;
soy como el cielo,
y a veces suspiro.
Soy trovador cansado y sin lengua.
No canto. Ya no canto.
Soy como el alba tempestuosa.
Soy poeta para el alma viva.
Soy basto como el viento.
Yo soy como el bravo capitán
que habló sobre la vida y el cielo.
Yo soy docto como el libro de bolsillo.
Yo hablo con la mano en la boca.
Yo sueño.
Como para soñar busqué mi olvido;
para soñar, soñé.
Yo vivo.
Yo muero inquieto.
La vela me hace verme a lo lejos;
la velo cada noche
para acercar mi olvido.
Yo vivo.
Bastan tres versos:
Yo nazco
Yo vuelo
Yo muero.
Basta la vida.

Yo viví como el alma de mis versos.
Yo viví cansado.
Aún no he muerto.
Yo moriré.
Aún no he muerto.
Yo vivo.
Yo sueño.
Yo escribí de la vida y el alma.
Escribí, y dejéme escrita
mi palabra.
Un olor; el olor de la poesía.
Heme ahora, olvidado,
heme ahora.
Docto olvido, mi palabra
es pequeña;
mas cuando abraces mi vida
seguiré dormido.
Heme ahora, soñador
de versos.
Heme ahora.