lunes, 28 de febrero de 2011














Dime, ojos fríos.

De alba enjuta en el canto
se llena el alma que me vierte,
cuerpo en el día, primavera
cansada.

Yo quisiera ser como un
oscuro clarecer del alba,
como la sombra de un largo día,
como el miedo inmenso de la valentía,
ay, si más pudiera ser
menos sería.

Yo quisiera ser de todo
y ser nada,
ser fuertemente débil,
descansar despierto
en un minuto junto
a la vida que llevo
y que me lleva.

martes, 1 de febrero de 2011

TANGO


*

Un verso aquí sentado.

Cómo decirte que la vida
es pequeña flor y amarga,
ay, dulce sombra, allí
umbrosa, en la memoria.

Cómo decirte que si estuve frágil
no hubo viento ni aliado,
y que todo es la agobiante mañana
que espera un canto o un quejido,
quieta, en el cielo,
junto al hombre.

Cómo decirte que tu viento abusa
de los árboles y que mi quejido es dulce.
Cómo decírtelo todo y querer
abreviar el mundo en un suspiro.
Cómo suspirar si mi llanto es lento, ay...

Si vivir fuera un descanso
no habría fatiga ni amor.
Pero vivir es vivir
como sueña el hombre en la noche,
taciturno y sensible.

Entonces la flor es débil
y la canción amarga,
y aparece otra vez,
como un sueño impasible,
la mañana.