es un sueño.
Definirlo quisiera como el dolor
de la piedra en el zapato,
o como el calzado horrible.
Pero este mar de ambiente absurdo
no es un dolor ni una alegría.
Se asemeja más bien a la locura
o a la ingratitud del hombre serio.
Así es este mar de ensueño en la noche.
Amar quisiera todo el pensamiento
vivo, y me ensordece la vida.
Yo quisiera ser humilde
en medio de este mar que hiere.
Pues amor y albor en el sueño
descansan,
pero este mar profundo
y este ambiente
son como querer morir deprisa
entre la ausencia.
En este mar de ambiente absurdo
cabalga la vida y esa gente
que llora profunda
ante la aurora.